Paz Verdadera
La verdadera paz no viene por la ausencia de problemas, sino por la presencia de Dios.
La verdadera paz no viene por la ausencia de problemas, sino por la presencia de Dios.
Podemos permitir que nuestros pensamientos se detengan en lo malo hasta que lleguemos a estar totalmente decepcionados y arruinados, o podemos poner nuestra atención en todo lo bueno que nos sucede en la vida, y en todas las bendiciones que Dios todavía tiene almacenadas para nosotros en los días venideros.
El poder de los pensamientos es tal, que puede llevar a una persona a cometer terribles acciones de las cuales tendrá que arrepentirse. Cual es su pensamiento en su corazón, el tal es el. Proverbios 22:7.